El Real Madrid ha salido en San Mamés con Casillas en la portería, Sergio Ramos, Albiol, Garay y Arbeloa en la defensa, centro del campo con Lass, Xabi Alonso y Marcelo, con CR9, Benzema y Kaká por delante.
En el minuto 2 se produce un error defensivo del Madrid en un córner de Yeste y gol de cabeza a placer de Llorente, que estaba totalmente libre de marca.
Esta desgracia de gol ha marcado la totalidad del encuentro. El Bilbao haciendo acopio de su historia ha empleado fuerza, presión y más cosas en la defensa de este tanto y el Madrid ha entrado en este juego que no le convenía de ninguna manera, porque cuando ha parado el balón y ha tocado rápido, al primer toque, los huecos defensivos del Bilbao eran escandalosos y se han visto.
Así se han producido innumerables ocasiones que el Madrid, en día nefasto ha sido incapaz de traducir en goles. Jugadas reseñables han sido en el minuto 10 el tiro de Benzema, en el 24 centro de Ramos que remató CR9 y paró el portero.
En el minuto 34 una gran jugada acaba con pase de Kaká a Benzema que ante la salida del portero le cambia el balón al poste derecho y cuando se canta el gol del empate, el balón se estrella en el palo y sale fuera. Cualquiera de estas ocasiones hubiera cambiado el ritmo del partido porque el Athletic de Bilbao estaba acusando el esfuerzo y se venía abajo, aunque hay que destacar la enorme ilusión, fuerza y amor a los colores que han puesto los bilbaínos presionando todos los balones de los que disponía el Madrid .
En una nueva ocasión del Madrid, por el buen remate de Xabi Alonso, que para el portero. En el 45 es Garay el que lo intenta pero su cabezazo sale fuera.
En el descanso no se veía el partido perdido porque el Real Madrid estaba entregado, salvo que cometiéramos los mismos errores que el pasado domingo en Pamplona; de querer jugar un partido tenso, fuerte en las entradas, y peleando por los balones divididos, y lo hemos vuelto a hacer. En vez de jugar el balón con tranquilidad, que era totalmente del Madrid nos hemos vuelto a encerrar en el juego de patio de colegio que es lo que pedía el Bilbao.
No obstante lo anterior, el segundo tiempo ha vuelto ha ser de claro dominio del Madrid con otro montón de ocasiones de peligro que no se han concretado. El Bilbao ha continuado con su juego fuerte y de presión, anulando las posibilidades madridistas.
En el minuto 59 se produce un cambio en el Madrid, se marcha Marcelo y entra Guti. Marcelo no ha realizado buen partido y el cambio se nota en la apertura de banda del Madrid que hace un juego más ancho, porque en el primer tiempo a Kaká, a pesar de estar bien de la lesión, tampoco se le ha visto.
En el minuto 60 Cristiano Ronaldo gana la acción a la defensa y se queda solo delante del portero, pero le pega un balonazo al muñeco que ya está en el suelo.
CR9 estaba muy nervioso y desequilibrado por las continuas provocaciones de los defensas rojiblancos que le cosían a patadas, cuando se levantaba se liaban a empujones con él y a insultos y el crack portugués tiene que aprender a pasar de estos simples obreros del fútbol que basan su juego en desequilibrar a las figuras. Incluso la actitud, como en el Reyno de Navarra del público de continuos insultos a su persona. De todas formas hay que felicitar al portugués porque no se ha encogido en ningún momento ante un público insultón.
En el minuto 70 Granero sustituye a Lass, que se ha pegado un palizón cortando balones. En el minuto 77 Raúl sale al campo sustituyendo a Benzema que no ha tenido su día en las ocasiones que se le han presentado. Raúl es recibido con una estruendosa pitada, es lo que les pasa a las figuras cuando juegan en campos que aunque se denominen catedrales tienen un público que no se merecen.
En el minuto 71 a punto está de llegar el empate, una gran jugada de CR9 con pase de la muerte hacia atrás en el área pequeña, es rematado por Kaká que lo lanza por encima del larguero. Increíble. Parece que nuestro santo no está acostumbrado a jugar en el infierno.
Enhorabuena sobre todo al portero vasco, Iraizoz, que ha realizado un gran partido y ha salvado a su equipo.
Y volver a insistir que el Madrid no puede perder partidos como este o el pasado contra el Osasuna, equipos que al no tener mucha clase hay que jugarles técnicamente y con rapidez porque sino se animan y te comen.