El Real Madrid salta al campo con Casillas, Marcelo, Sergio Ramos, Carvalho, Arbeloa, Xabi Alonso, Khedira, Di María, Ozil, Cristiano Ronaldo y en punta Higuain.
La crónica de este partido es la misma que la de los anteriores, un equipo blanco, el Real Madrid, con una firme defensa que controla exhaustivamente el partido, que dispone de numerosas ocasiones de gol y que es incapaz de convertir alguna de estas.
La estrella fugaz de Ozil en el partido ante el Ajax hay que volverla a encontrar de una u otra forma para que se pueda conseguir materializar algún gol, ya que habrá que crear miles de ocasiones para que el Pipita sea capaz de conseguir algún gol.
Así desde luego no ganamos un partido, basta con que un equipo salga colocado y firme en las posiciones, que aunque sea muy modesto como el de esta noche, otro Alcorcón, le impida conseguir la victoria. Y esto Mourinho lo tiene que arreglar pensando la forma de dar más mordiente al equipo.
Tiene que pensarlo bien porque los cambios que ha hecho de quitar a Di María y Ozil para dar entrada a Pedro León y Benzema no han solucionado nada, porque lo que hay que conseguir es mayor velocidad y compenetración en los últimos metros y también exigir a los jugadores una mayor afán de entrega.
Esperemos que el próximo miércoles contra el Ajax en Amsterdam sean capaces de volver a encontrar el gol y el juego, como aquel que nos maravilló en el Bernabéu ante los holandeses.