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Sporting de Gijón 0 – 1 Real Madrid

El Real Madrid sale con el equipo habitual, Casillas en la puerta, Sergio Ramos, Carvalho, Pepe, y Marcelo en la defensa, Xabi Alonso, Khedira, Di María, Özil, Cristiano Ronaldo, Higuaín en punta.

El equipo blanco a pesar del mal ambiente creado por el entrenador del Gijón, Manuel Preciado, sale decidido a liquidar el partido cuanto antes para no complicar las cosas pero a pesar de su dominio y ocasiones de gol no consigue nada positivo y el partido se vuelve bronco y enzarzado, no es que el Sporting produzca peligro pero el juego desaparece del campo, quizás se note la ausencia de Mourinho dando instrucciones y modificando el juego.

Así transcurre todo el primer tiempo sin cambios, la táctica de Preciado, que hoy si que ha sacado a todos los titulares, funciona y el Sporting se conforma con un puntito pero que al Madrid le resulta totalmente pobre. Parece mentira que este señor que ha conseguido embrollar las cosas cuando el entrenador del Madrid solo ha citado estadísticas y eso que no comentó la última jornada de Liga, cuando sacó a los juveniles para jugar contra el Racing y salvar al equipo de su pueblo, sin pensar en el fair play del que tanto presume.

El Real Madrid comienza la segunda parte, después de la charla con Mourinho como empezó el partido con ataques y jugadas de peligro, pero la ausencia del portugués en la banda técnica parece que se deja notar y otra vez comienza a decaer el juego.

En el minuto 4 se produce un buen disparo de Di María que el portero lanza a corner. En el 9 una gran jugada de Di María que pasa a Higuaín y marca, el árbitro lo anula por un dudoso fuera de juego.

El equipo blanco empieza a darse cuenta de que no puede irse de El Molinón sin ganar y empieza a apretar sobre todo empujado por Marcelo que sigue siendo la figura del equipo. Las cosas están tan mal que Karanka recibe órdenes del jefe de meter a Benzema y lo hace en el minuto 18 por Di María.

Los minutos que ha jugado el francés han sido, como en los últimos encuentros, buenos, parece que ya entiende a su entrenador. Así en el minuto 30 lanza un disparo pero el portero consigue rechazar a corner.

En el minuto 33 en una excelente jugada entre CR7 y Marcelo, con sucesivas paredes, llega este al área pequeña donde dispara con potencia pero al lateral de la red.

La cosa no parece tener solución para los blancos pero en el minuto 36 Sergio Ramos ve a Benzema en el segundo palo y le da un pase que este remata de un espléndido cabezazo que el portero para sin conseguir retener, Higuaín que está a rechace marca a puerta vacía. Es el 0 – 1.

El Madrid ve la cosa hecha y se relaja con lo que el Sporting da las últimas boqueadas para conseguir ese punto por el que ha luchado todo el partido pero el Santo, que no había intervenido en todo el partido, se aparece en el minuto 38 y hace un paradón inconcebible a un remate de cabeza a bocajarro.

Como consecuencia de esto los blancos aseguran la retaguardia sacando a Lass Diarrá por Higuaín y la cosa se tranquiliza y para estar más seguros en el minuto 43 Arbeloa sale por Özil.

Prácticamente en la última jugada del encuentro CR7 se escapa por la banda izquierda regateando a dos defensas, pero el central Botía no está dispuesto a quedarse sentado en el suelo y cuando pasa el portugués le suelta una tremenda patada en el estomago para parar la jugada, el árbitro le saca tarjeta roja y concluye el encuentro.

El Madrid no ha jugado nada bien, pero ha hecho lo necesario para ganar en un ambiente extraño creado por Preciado que habrá quedado muy contento con la exhibición de teatro de alguno de sus jugadores, la pérdida de los tres puntos y de mejor defensa central para la próxima semana jugar en el Reino de Navarra contra el Osasuna que es uno de sus directos rivales. Que bien hizo contra el Barcelona en reservarlo para que no le pasara esto.

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